lunes, 2 de febrero de 2009

Gente Pez (de...1ªde cua)

2 febrero 2007

Gente Pez
*Pauline con tomate.
*Dedicado a la máquina de hacer planos, la luna es un plano que se le escapó...
*Oyendo The Beatles, grupo atún por excelencia...


“Resulta que un día en la playa dedujimos que yo era un atún. Siempre tienes atún en alguna parte de la alacena, unas cuantas latas que están allí...cuando tienes muchas más cosas, no comes atún, pero cuando llega fin de mes...ves el atún allí, y te sirve para la pasta, te sirve para un sandwich...es muy socorrido, el atún siempre está ahí. Y esa soy yo, el atún que nunca te falla, pero que no es una exquisitez...yo me siento así, en el fondo de la alacena a veces, y lo peor, si vienen a buscarme, me alegro.
¿me alegro?”
Alejandra Casualidad.

Uno de los mejores recuerdos que tengo de mi infancia eran los días de piscina en el verano. Cada mañana, mi madre me preparaba un bocadillo de atún con tomate. Yo no quería otra cosa. Los otros niños renegaban de él, preferían el de Nocilla (hasta en verano, todo peguntoso...). El caso es que, conforme avanzaba el verano y mis amiguitos probaban el bocadillo de atún con tomate, a mi madre no le quedó más remedio que hacer bocadillos para todos. Como cuatro barras de pan en pequeños bocadillitos.

Sí, hay gente pez, y dentro de la gente pez, resulta que hay gente atún. Si nos extendemos un poco, también hay ropa atún, música atún y hasta calcetines atún... La vida suele ser cruel con el tipo de personas dejadas en la alacena para más tarde, para cuando haya necesidad real y absoluta. Sólo entonces, cobran un poco de protagonismo en la vida de alguien, por un inciso escaso, porque su papel es el de salvavidas, no hay nada mejor que saber que tienes una lata en la que hay una persona metida en escabeche que no caduca hasta el 2050.

Pero es egoísta comer atún sólo cuando no hay nada más. Las personas atún, despojadas de toda su dignidad, también se merecen un respeto. Así que, si crees tener una persona atún en tu alacena, tienes dos opciones, o sacarla de ahí y engullirte lo que es (suelen ser personas con taaanto dentro) o, simplemente, dejarla hacer vida.

Y tú, persona atún, empieza a rasgar la lata para que, al menos, cuando recurran a ti te hayas olvidado de tu función de salvavidas, o, mejor aún, te comento, resulta que hay personas que tienen al atún como una muy digna opción, y ahí van, todo el día comiendo atún de todas las formas posibles.

Y eso, por algo será.

Leí hace muchos años en “Lobo negro, un skin” que una persona es una persona. Y, algo que parece tan tonto, a veces hay que recordarlo porque a mucha gente se le olvida...

Mi madre hace el bocadillo de atún con tomate más bueno del mundo.
Porque mi madre es buena, el atún es bueno y ella le pone mucho amor.

El atún no empacha...y pobre de ti el día que confías en encontrar tu atún en la alacena...y sencillamente no está.

Y es que, queridos amiguitos, la casualidad une a personas-atún, que forman packs indivisibles que van por la vida impregnándose de todo lo que, a ojo de los demás, es inservible.

Libertad y dignidad a los atunes en conserva!!!
Te salvan la vida y nunca reciben ni un minúsculo agradecimiento.
Total, hasta el 2050 hay tiempo...

No hay comentarios: